Más del 75% de la población española ha depositado su voto en las urnas durante las últimas Elecciones Generales celebradas en abril, unas cifras que no han dejado indiferente a nadie. Pero más aún nos ha dado que pensar el número de votantes que lo han hecho por correo: un total de 1.241.728 españoles. Es una cantidad muy alta de personas. Y por ello, hoy nos preguntamos cómo funciona este proceso, qué problemas encuentran en él y a quién pueden reclamarlo.
¿Te animas?
Más de 60.038 mesas electorales. 23.196 distribuidas en localidades de España. Y más de 100.000 personas que no pueden votar desde la reforma de la LOREG. Y otros tantos que han depositado su voto por correo.
Votar es un acto de suma importancia para el bienestar social que sirve para apoyar una propuesta o apostar por un candidato de la lista. Desde luego, es importante para definir los caminos a seguir por la sociedad cada 4 años.
Este acto democrático ofrece la posibilidad de votar por correo para aquellas personas que no puedan acudir a las urnas, y, aunque se trata de una opción perfectamente manejable que más de un millón de personas ha llevado a cabo en el pasado mes de abril, presenta algunos inconvenientes:
¿Cómo podemos poner solución a este problema?
Cuando hablamos del voto electrónico nos referimos a distintos tipos de votación, desde formas electrónicas de emitir el voto hasta medios electrónicos para realizar su conteo. Lo que viene siendo, votar por internet. Esta iniciativa podría acabar con los inconvenientes que encontramos a la hora de hacer el voto por correo, desde el extranjero, el coste del voto actual, etc.
Países como India, Brasil y Venezuela ya han puesto en marcha sistemas de votación electrónica, de manera que obtienen las siguientes ventajas:
Según La Vanguardia, en España “el voto electrónico únicamente se ha probado a modo de prueba de manera esporádica desde 2004”.
¿Qué sucederá en los próximos años? ¿Veremos el voto electrónico como una solución definitiva a los problemas del presente?
Sin llegar a tomar decisiones de estrategia nacional de si el voto electrónico puede ser un sustituto del voto por correo, existen otros ámbitos donde sus cualidades son relevantes para agilizar y facilitar las votaciones en entornos muy distribuidos como pueden ser asociaciones nacionales, clubes deportivos, colegios oficiales, partidos políticos, etc. Si seres una de esas entidades y quieres facilitar el proceso de votación a tus afiliados, cuenta con Cibernos.