Hablar de transformación implica hacer un cambio. Modificar o alterar algo manteniendo un punto intacto: su identidad. Si además le añadimos el ingrediente digital, estaremos haciendo referencia a una de las grandes oportunidades de estrategia de negocios que surge gracias a la aparición de las tecnologías. Pese a ello, no se trata de una transformación tecnológica sin más, sino que lleva implícitas nuevas actitudes, así como la reinvención de las organizaciones.
De esta forma, la transformación digital se ha convertido en el gran reto al que se enfrentan las empresas en la actualidad, pues cada vez es mayor el número de estas que toman conciencia de su importancia.
Sin embargo, todavía se encuentran inundadas por numerosas dudas: ¿quién debe liderar la transformación en mi empresa? ¿está preparada para llevarla a cabo? ¿cómo debo hacerlo? Las respuestas más eficaces a estas preguntas solo las tienen los profesionales y expertos en la materia que han vivido en primera persona el cambio.
No todo el que habla de transformación digital está capacitado para servir de asesor o consultor, y mucho menos para llevarla a cabo. De esto es de lo que te vamos a hablar, precisamente, en este post.
En la actualidad, gran cantidad de personas tendemos a calificar como profesional a cualquier individuo que ejerce una profesión o que practica habitualmente una actividad. Aunque se trata de la definición que establece el organismo oficial de la R.A.E, cuando nos referimos a la transformación digital no basta con desarrollar un ejercicio de manera habitual.
Las razones son muy sencillas, y es que entre los más de veinte millones de resultados que puede dispararnos internet al investigar esta materia en sus buscadores, se encuentran aparentes profesionales en asesoramiento y consultoría tecnológica que no comprenden por completo el concepto de transformación digital. Es aquí donde se encuentra el primer error.
Llevar a cabo una transformación digital de las empresas no es una decisión fácil, pues el CEO (Chief Executive Officer), así como otros responsables de la actividad empresarial, deben tener muy clara la profesionalidad de quienes les van a ayudar. Por eso, creemos importante enumerar las características que todo consultor y asesor digital o tecnológico debe tener consigo y que los responsables de la transformación digital en la empresa deben valorar:
Detectar a profesionales no expertos en la transformación digital no es una tarea sencilla, sobre todo cuando nuestro conocimiento sobre la materia es escaso. Sin embargo, todo es posible. La digitalización es un concepto que abarca el mundo de lo digital y lo analógico, sin embargo, los consultores tecnológicos que no son expertos, llamémoslos ‘supuestos sabios’, ponen demasiado énfasis en proponer una apuesta pura por el canal digital.
Pues bien, no se trata solamente de eso. La transformación digital va mucho más allá, y es que resulta necesario automatizar los procesos comerciales, hacer de los documentos en papel archivos digitales que sean mucho más versátiles, facilitar las comunicaciones, y, sobre todo, reinventar el modelo de negocio.
De lo que no puede cabernos duda es de que, para conseguir mejorar los resultados y la competitividad de la empresa a raíz de la transformación digital, es necesario revisar todos los procesos de la empresa y no únicamente la presencia en el canal digital.
Se trata de una transformación que comienza por un cambio de chip. Una modificación a la que puede resultar complicado acostumbrarse. Sin embargo, ya lo decían algunos expertos: “las grandes cosas llevan su tiempo”. El CEO cumple un papel imprescindible dentro de la transformación digital, y es que debe ser “el estratega más importante y el líder transformador” del proceso. Por ello, las personas que dirigen las empresas deben sacrificarse para lograr que su organización camino de la mano de la actualidad y afrontar el futuro que nos acecha.
Se trata de un cambio en el núcleo de las empresas y de una transformación en su cultura. Por eso, el CEO tiene una alta responsabilidad en la toma de esta decisión. Su principal función dentro de la transformación digital es impulsarla, independientemente de la mayor o menor implicación que tenga en su día a día. Su responsabilidad, además, también recae en decidir quién será el responsable de llevarla a cabo, así como en el compromiso establecido. La transformación digital se ha convertido en un espíritu de cambio que, cuando entra en acción, modifica el modelo de negocio, los procesos internos, la relación con los clientes, el trabajo de los departamentos, etc. La decisión puede llevarla a cabo el CEO, pero el reto es de todos.
¡La tecnología ha llegado para quedarse! ¿Nos dejamos algo en el tintero?
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