Antes de que digas nada, piensa en la pregunta que te acabamos de hacer. Estás en la obligación de prevenir, de sacar las armas para disparar a la tentación de las actividades ilícitas y echar a correr con todas tus fuerzas. Hacer frente al blanqueo de capitales es un deber.
Que sí, que el Código Penal lo exige en su artículo número 31, pero no lo hagas por él, sino por ti. Hazlo porque te nace asumir la responsabilidad del cumplimiento de tu empresa y por ser un líder de los de verdad. Nada de palabrería barata. Ahora sí, es tu turno.
Si todavía no sabes muy bien cuál es el estado real de tu empresa, quizás sea el momento de asumir lo que hay que hacer para tener el control. ¿Pero de qué tipo de control estamos hablando:uno anual o uno orientado a la evaluación continua?
Todos soñamos con cubrir los Objetivos de Buen Gobierno, Control de Riesgos y Cumplimiento Normativo, lo que viene siendo el GRC, pero no todas las empresas se lanzan a ello, al menos no centrándose completamente en el contenido y objetivos que se esconden detrás de esas tres letras. Les detiene el miedo, la comodidad o el desconocimiento.
Lo cierto es que en Cibernos, disponemos de un producto que proporciona una capacidad de control multinorma por la gran flexibilidad que aporta de cara a la organización del control del cumplimiento a través de una doble visión: la Orgánica y la Funcional.
Nuestro enfoque fija la mirada en la seguridad y en la garantía de que los principios GRC, en general y los específicos anti blanqueo de capitales son cumplidos y seguidos continuamente.
Así que, si te estás preguntando por qué te contamos todo esto, simplemente queremos recordarte que para saber en qué estado se encuentra tu empresa, o simplemente si está a salvo del blanqueo de capitales, una herramienta como el motor de cumplimiento puede ser la mejor arma para identificarlo.
Riesgos penales, continuidad de negocio, mejora social… Existen tantos escenarios de aplicación, que elegir uno solo parece una tarea demasiado compleja. Déjanos decirte que el blanqueo de capitales atiende al incumplimiento de los compromisos y obligaciones. Normalmente nadie se implica en acciones de lavado de dinero, sino todo lo contrario. Pero la tentación está ahí y hay empleados que caen en ella. El cumplimiento operativo es, por tanto, el asiento sobre el que descansa el blanqueo de capitales de las empresas. Y por ello la empresa se debe dotarse de herramientas específicas que lo eviten.
Recordemos que la gestión del cumplimiento vela por los detalles, en este caso de caso a nivel de las operaciones a nivel individual, mientas que el control del cumplimiento se establece a nivel global. Lo habitual sería que la entidad dispusiera de un primer nivel de protección basado en productos o servicios específicos o embebiendo en sus propios sistemas los controles operativos necesarios, ya sean financieros, recursos humanos, proveedores,…
¿Suponiendo que ya has implantando estos sistemas de gestión del cumplimiento, lo tienes ya “evaluados” con el sistema global de control de cumplimiento de la organización?
Cuando hablamos de sistemas automáticos no nos podemos olvidarnos del Motor de Cumplimiento del que te hablábamos líneas más arriba. Y no podemos hacerlo porque es el sistema idóneo para disminuir alto y claro la dedicación de las personas para recoger información y elaborar informes de cumplimiento. Este sistema, una vez parametrizado adecuadamente, nos ayudan a vigilar los criterios impuestos y autoimpuestos por la entidad con una frecuencia muy superior a la manual y sin consumir apenas recursos del Área de Cumplimiento.
Déjanos hablar de estas acciones como parte de las ventajas del Motor de Cumplimiento por tratarse de situaciones de superioridad que se consiguen cuando se pone en marcha.
Digamos adiós a la captura manual de los datos para dar la bienvenida a la incorporación automática de estos y de cualquier evidencia de terceros sistemas. Digamos también adiós al descontrol del seguimiento de las acciones de corrección. Y digamos también adiós al tiempo perdido en hacer PPT, gráficos e informes para la direccion y terceros que justifiquen el cumplimiento realizado.
En definitiva, dejemos atrás todo aquello que ya no suma, sino que resta tiempo, esfuerzo y, a fin de cuentas, dinero. Dejemos atrás todo eso para incorporar un auténtico control automatizado del cumplimiento adaptado a las necesidades de la empresa moderna.
Y recupera tiempo para pensar, modelar y actualizar el mejor esquema de cumplimiento que tu organización necesite. Está en tu mano.