El ERP moderno es un tipo de software empresarial muy completo, desde el que puedes gestionar prácticamente cualquier aspecto de la empresa. Pero ¿cuáles son los beneficios de un ERP?. ¿Qué ventajas concretas tiene y en qué pueden ayudar a una organización?.
A juzgar por los resultados de un estudio llevado a cabo por SoftDoIt, la demanda de ERP aumentó durante el año pasado. Y es que las soluciones ERP siguen aportando valor a las empresas, gracias a que se han ido adaptando a los cambios del nuevo paradigma digital (SaaS, Cloud Computing, Big Data…).
Hoy me gustaría hablar sobre los beneficios de un ERP para la empresa basándome en mi experiencia. Trataré de responder a las preguntas que puede estar haciéndose alguien que empieza a interesarse por este tipo de software empresarial. Si es tu caso, sigue leyendo. Creo que te puede resultar de utilidad la información que encontrarás en este artículo.
ERP son las siglas de Enterprise Resource Planning, y que podríamos traducir como “sistema de gestión de recursos empresariales”.
La traducción que hemos hecho ya es bastante ilustrativa de lo que se consigue con este tipo de soluciones de software.
Además, su arquitectura modular permite adaptar el programa a las necesidades de la empresa y suele integrar módulos con funcionalidades propias de otros productos como los CRM, los BPM, etc. (y en caso de que no los ofrezca el proveedor de software a menudo se pueden hacer integraciones con desarrollos a medida).
Una vez delimitado el concepto de ERP, paso ahora a explicar las ventajas de este tipo de soluciones para las empresas.
Las principales aportaciones de un software de planificación o gestión de recursos empresariales son los siguientes.
En una organización es muy frecuente que algunas tareas que introduzcan datos por duplicado, con la pérdida de tiempo que supone y generación de incoherencias, y lo desmotivador que puede llegar a resultar para el personal.
El ERP conecta a la empresa con clientes y proveedores, de modo que la compañía logra una mayor integración con el resto de miembros implicados en la cadena de valor.
La información que obtiene de los clientes le permite ajustar las órdenes de producción y de compra a las necesidades en cada momento específico.
Disponer de todos los datos de la empresa centralizados es otra de las cosas que aporta un ERP a las empresas.
Y gracias a ese almacenamiento centralizado de los datos, la información fluye con mayor facilidad entre los diferentes departamentos de la empresa, lo que agiliza los trámites y permite una mayor coordinación a todos los niveles.
Su funcionamiento a través de módulos permite adaptar el software a las necesidades de la empresa.
En algunos casos, los ERP exigen cambios en los procesos de la empresa (reingeniría de procesos), pero en cualquier caso los cambios deben estar orientados a mejorarlos.
Lo que te aconsejo desde mi experiencia es que recurras a herramientas de código abierto que permitan la máxima personalización sin el pago excesivo de licencias.
Otra de las ventajas de la estructura por módulos es que siempre se puede ampliar conforme las exigencias de la empresa van en aumento.
La escalabilidad es uno de los aspectos que más se deben valorar a la hora de escoger una solución de software empresarial como un ERP.
En una empresa siempre hay tareas tediosas y repetitivas que apenas aportan valor, pero que son necesarias. Los empleados se ven obligados a desempeñarlas, pero estas pueden llegar a socavar su productividad.
Los sistemas de gestión de los recursos empresariales pueden automatizar esas tareas liberando a los trabajadores del trabajo más tedioso para que puedan afrontar otras labores más creativas y motivadoras (es decir, más productivas).
En el ERP están todos los datos de la empresa, lo que permite una visión panorámica del negocio que aporta información muy valiosa para la tomar medidas estratégicas y tácticas.
Además, algunos ERP integran un módulo de BI, que es un software específico para facilitar la consulta en base a indicadores gráficos muy visuales. Además, la funcionalidad de autoservicio permite su adaptación a las necesidades de cada usuario.
Todo ese incremento en la inteligencia y el aprovechamiento de los recursos finalmente se traduce en un ahorro muy significativo en costes y un aumento en los beneficios.
Con un ERP, hay más margen para realizar inversiones que verdaderamente aporten valor a la compañía gracias a la minimización de los costes, y la empresa es más capaz de dar respuesta al mercado, aprovechando al máximo el time to market.
Si me permites un último consejo, si en tu empresa estáis pensando en implementar una solución de ERP, el primer paso es procurar un buen servicio de consultoría que os ayude a definir las líneas maestras de la implantación del software, y qué se necesita para adaptarlo a vuestro negocio.
Puedo ayudarte a resolver tus dudas. Si hay algo que te inquieta compártelo conmigo. Mi experiencia puede serte de gran utilidad.